TU GUÍA COMPLETA PARA LA RESTAURACIÓN DE LA PIEL

PEELINGS

Se trata de un tratamiento dermatológico diseñado para exfoliar las capas más superficiales de la piel, fomentando su reemplazo por otras de mejor calidad y textura mediante dermoabrasión o la aplicación de diversos productos químicos. Este proceso promueve la renovación cutánea y elimina impurezas, proporcionando luminosidad a la piel. Además, contribuye a unificar el tono cutáneo y a reducir las manchas causadas por la exposición solar. Aunque la piel realiza naturalmente su propio proceso de renovación, este se vuelve más lento con la edad, por lo que el peeling ayuda a mantener la piel limpia y libre de imperfecciones.

Este tratamiento está recomendado para personas de ambos sexos y cualquier edad, siendo especialmente efectivo en aquellos con acné, cicatrices o manchas en la piel, ya que ayuda a unificar el tono cutáneo. También es adecuado para la piel fotoenvejecida por la exposición solar prolongada. Es un procedimiento no invasivo y ambulatorio, con efectos visibles en pocos días. Normalmente, se experimenta enrojecimiento inmediato que puede durar unos días, así como la formación ocasional de costras o sequedad en ciertas áreas, dependiendo del tipo de peeling utilizado.

La elección del tipo de peeling debe ser realizada por un especialista en dermatología, quien evaluará el tipo de piel de cada paciente, sus objetivos, características y necesidades personales. Además, el especialista estará capacitado para informar sobre posibles molestias o efectos adversos asociados al tratamiento.